Abrazar nos hace más felices
Varios estudios afirman que el contacto físico afectivo puede mejorar nuestra autoestima, reducir el estrés y proporcionarnos felicidad a lo largo de nuestra vida.
¿Alguna vez has sustituido una palabra afectuosa por un abrazo?
Seguro que ya estás recordando algún momento en el que lo hayas hecho y es que abrazar es hablar el lenguaje del corazón. Es una forma maravillosa de dar amor a los que nos rodean.
Cuando das un abrazo estás acariciando el alma de la otra persona, proporcionándole un refugio entre tus brazos. Un gesto pequeño pero repleto de sentimientos que cura y recompone a nivel emocional.
Igual que nos pasa con el deporte, que nos llena de energía y fuerza para comenzar o continuar con el día, el abrazo es un gesto con el que también podemos transmitir energías y mucha fuerza.
Es una forma maravillosa de dar amor a los que nos rodean, pero también es una forma de celebrar cuando completamos una actividad, marcamos un gol o ganamos una medalla.
Principales beneficios de dar un abrazo
Entre los principales beneficios del abrazo a nivel emocional destacan:
- Sensación de protección. Un abrazo genera confianza y seguridad, especialmente en situaciones de angustia o nerviosismo.
- El confort que proporciona el abrazo tiene efectos más rápidos que el de las palabras. Las sensaciones corporales llegan antes al sistema nervioso y se interpretan de forma inmediata.
- Un abrazo dispara la producción de oxitocina, serotonina y endorfinas. Este grupo de hormonas guarda una estrecha relación con la sensación de bienestar y felicidad y contrarresta el efecto negativo de otras hormonas como el cortisol y la adrenalina, relacionadas con las situaciones de estrés.
Al abrazar se segrega oxitocina (hormona relacionada al placer), se libera serotonina y dopamina (encargadas del buen humor), lo que genera una agradable sensación de armonía y plenitud, una dosis cargada de bienestar para el cuerpo y el alma.
Ello reduce el estrés, la presión arterial y el ritmo cardíaco, mejora el flujo sanguíneo, favorece al sistema inmunológico, estimula la hormona del crecimiento en los niños, disminuye las probabilidades de padecer demencia, aporta sensaciones de seguridad, energía y fortaleza.
Consejos para dar un abrazo de los buenos
Algunos investigadores han identificado que el abrazo perfecto debe durar como mínimo 20 segundos. Sin embargo, es fundamental considerar que esto puede ser variable, pues abrazar es una acción muy personal.
Ante todo, dar un abrazo debe ser algo confortable para quien lo recibe y para quien lo da. Porque hay muchas personas a las que les gusta abrazar y ser abrazadas, pero hay muchas otras que no.
Aún así todos los tipos de abrazos proporcionan algún beneficio para la salud física y emocional de las personas. Pero lo más interesante de todo es que el poder de un abrazo se prolonga en el tiempo. Convertir los abrazos en un hábito es introducir en tu vida una rutina muy saludable.
Desde Besoul te recomendamos realizar este sencillo acto sin moderación para el bienestar psicológico, emocional y corporal.
No esperes a que tus seres queridos te digan “necesito un abrazo”. Siempre es un buen momento para demostrar tu afecto con abrazos de amor que queden para siempre en el recuerdo y nunca desestimes el poder de un abrazo: son la mejor medicina para el alma.